Ahorro y crédito
El ahorro
El ahorro resulta de aquella parte del ingreso de una persona, una empresa o un país que no se utilizó para el consumo inmediato de productos y servicios. Este ahorro, por lo general, lo llevan o cabo las personas y las familias, por motivos tan diversos como mantener una reserva en dinero para atender un gasto eventual en el futuro, financiar más adelante la educación de los hijos, comprar una vivienda e inclusive para garantizar estabilidad económica en la vejez (mediante sistemas especiales de pensión y seguros de vida).
El salario o el ingreso disponible de una persona es destinado, en primer lugar, al consumo; la mayor parte de la producción de mercancías y servicios en el país se encuentran hacia esta finalidad, la otra parte del ingreso, que no se utiliza en el consumo, se debe ahorrar. Por ejemplo, si un empleado de una fábrica recibe un salario de 800.000 pesos mensuales y utiliza 700.000 pesos en el consumo de productos y servicios, es decir, en el pago de alimentos, vestuario, transporte, salud, educación, arriendo de la vivienda y recreación, entonces puede disponer de 100.000 pesos para ahorrar.
Los depósitos
Cuando en economía hablamos de un depósito nos referimos al acto mediante el cual una persona o una empresa confía dinero a un banco, una corporación, una cooperativa o cualquier otro establecimiento financiero. En efecto, cuando depositas dinero en un banco, esta entidad expide de inmediato un documento o comprobante donde indica que acaba de contraer una deuda contigo y se compromete a devolverte el dinero en una determinada fecha, o en distintos plazos.
Tipos de depósitos
Las instituciones financieras tienen varias alternativas para recibir dinero en depósito: cuenta de ahorros, cuenta corriente, certificado de depósito a término (CDT) y títulos de valor.
Dineros a la vista: Se llama dineros a la vista a los depósitos que están permanentemente disponibles para el ahorrador, pues el dueño de la cuenta puede retirar en cualquier momento su dinero o una parte de éste, los dineros a la vista pueden encontrarse en cuentas corrientes o de ahorros.
CUENTA CORRIENTE: Hace parte de los medios de pago y, como tal, no son ahorro del público, es decir, no son exactamente recursos que dejan de utilizarse en consumo por un tiempo, sino que tienen que estar permanentemente disponibles para respaldar el consumo y los demás gastos de las personas o empresas dueñas de este tipo de cuentas. En la práctica hacen parte del dinero circulante.
CUENTA DE AHORROS: Es un depósito, que sí se convierte en ahorro, porque la entidad financiera que lo capta paga un interés determinado por el dinero que le ha sido encargado. Es un dinero a la vista porque en cualquier momento el ahorrador puede retirar parcial o totalmente su dinero, a través de una transacción con talonario o cajero automático.
Certificado de depósito a término: Un certificado de depósito a término (CDT), como su nombre lo indica, es un depósito que tiene un término de vencimiento fijo, o lo que es lo mismo, el dinero sólo se puede retirar en la fecha pactada entre la entidad financiera y el ahorrador. Estos certificados los expiden los bancos y las corporaciones con un plazo de vencimiento de 15, 30, 60, 90, 180 ó 360 días. Aunque, los CDT que expiden las entidades financieras, no son un método de ahorro inmediato, son sustitutos muy próximos del dinero, pues se pueden negociar y convertir fácilmente en dinero en las bolsas de valores.
Título de Valor: Es el nombre genérico que reciben algunos documentos que emiten las instituciones financieras, empresas o el Gobierno, en los que se vende una acción que da derecho a recibir un interés o una ganancia dependiente de la rentabilidad de la empresa.
El crédito
El dinero que utilizan los bancos, corporaciones y cooperativas para el otorgamiento o suministro de créditos, proviene de los recursos que estos establecimientos financieros recogieron como depósitos del público, a través de cuentas de ahorros, depósitos a término (CDT), valores y títulos. El crédito se define como la transferencia de dinero a cambio de una promesa de pago en el futuro. Su significado etimológico es creencia o confianza.
Al tratar de identificar las razones económicas que mantienen determinados patrones de comportamiento frente al ahorro y al crédito, se encuentra que las familias, en general, se caracterizan por consumir sólo una parte de su ingreso y destinar el excedente al ahorro. En cambio, las empresas se destacan como agentes que gastan de forma inmediata su ingreso y, además usan el crédito para financiar inversiones en cualquier campo de producción o distribución. Cuando las empresas utilizan el crédito, están comprometiendo el ingreso futuro que obtendrán en la venta de sus productos o servicios.
Tipos de crédito
Los establecimientos financieros ofrecen distintas modalidades de crédito, siendo las más utilizadas las siguientes:
Crédito comercial: Consiste en el otorgamiento de préstamos para financiar inversiones en equipos, maquinaria, materias primas y modernización de instalaciones. Es decir, para mantener la dinámica de los negocios y las empresas.
Crédito hipotecario: Se trata de préstamos dirigidos exclusivamente a financiar la compra de vivienda nueva o usada, lo mismo que a la remodelación de inmuebles. Este tipo de crédito también es otorgado a las constructoras para distintas obras, entre ellas, urbanizaciones, parques y centros comerciales.
Crédito de consumo: Esta línea o sistema de financiación es utilizada especialmente por las familias, pues se trata de un crédito otorgado a una persona particular, con el propósito de que pueda comprar vestuario, electrodomésticos, vehículo, pasajes aéreos o planes de vacaciones. El instrumento más común en esta modalidad de financiación es la tarjeta de crédito, que sirve para comprar prácticamente toda clase de productos y servicios.
Tarjeta de crédito: Instrumento financiero que actúa como medio de pago para la compra de productos y servicios. Se le conoce también como dinero plástico y consiste en el uso de una línea de crédito otorgada por una entidad financiera a una persona o empresa, la institución que expide la tarjeta se compromete a pagar las facturas que le presenta un comerciante y que portan la identificación de la tarjeta y la firma del usuario.
Tasas de interés
El dinero, al igual que los alimentos, los automóviles, la educación o el transporte, tiene un precio en la economía. Ese precio depende de la abundancia o la escasez de dinero en el mercado financiero, es decir, en los bancos, corporaciones y demás establecimientos financieros. En la dinámica diaria de los negocios y la economía hay una relación permanente entre la oferta de dinero disponible para prestar y la demanda o solicitud de créditos. Esta interacción entre oferta y demanda de dinero define, finalmente, el precio que se pagó por éste, el cual se conoce como tasa de interés.
El alza, estabilización o reducción de las tasas de interés depende del desempeño de la economía y de la demanda de medios de pago para las transacciones. Por ejemplo, en un periodo de alta producción y de auge en el crecimiento de la economía, cuando las expectativas de los negocios son buenas y la inversión, el empleo y el ingreso de los personas aumentan, se requiere más medios de pago para facilitar el intercambio de los productos y servicios. Si la autoridad monetaria, no facilita el incremento de la circulación de dinero, de inmediato la tasa de interés sube, con lo cual se frustra la expansión de la economía, pues cuando el dinero se pone caro se reduce la inversión de las empresas y esto genera desempleo.
Margen de intermediación
A los bancos, corporaciones y cooperativas financieras se les conoce también con el nombre de intermediarios financieros, pues su función fundamental es transformar el dinero que reciben del público en créditos. Así, por ejemplo, captan dinero de las familias, las empresas y el gobierno a través de sus cuentas corrientes, de ahorros o mediante la expedición de certificados de depósito a término (CDT), títulos y bonos a una tasa de interés promedio del 13% anual (ejemplo) y estos recursos son prestados de inmediato a un interés promedio del 24% anual (ejemplo). Esa diferencia -siguiendo el ejemplo- de 11 puntos porcentuales que obtiene la entidad financiera entre la tasa de interés que cobra a los usuarios de créditos y la que paga a los depositantes, se conoce como margen de intermediación, y es la ganancia bruta de los bancos y demás instituciones financieras. La tasa de interés que las instituciones financieras reconocen a los depositantes se llama pasiva y la que cobran a los usuarios de créditos se denomina activa.
Últimos Articulos
- Guía: Filosofía. El hombre
- Guía: Filosofía. Libertad
- Guía: La India
- Guía: Egipto Antiguo
- Tipos de relaciones y salidas al conflicto
- Pablo de Tarso
- Directiva 02 de 2018: Modificación parcial de la Directiva 50 de 2017
- Directiva 50 de 2013: Funciones y horario de trabajo de los docentes orientadores
- Directiva 16 de 2013: Jornada Escolar, Laboral y Permisos Remunerados de Educadores
- Decreto 2105 de 2017: Jornada única escolar
- El Bajo Imperio: Cristianismo y poder imperial en Roma
- La Constitución de Prusia
- El Bajo Imperio: Difusión y organización del cristianismo primitivo
- Europa y sus relaciones con Oriente
- El Bajo Imperio: El mundo romano en vísperas del cristianismo
Notas de interés
- Guía: Filosofía. El hombre
- Guía: Filosofía. Libertad
- Guía: La India
- Guía: Egipto Antiguo
- Tipos de relaciones y salidas al conflicto
- Pablo de Tarso
- Directiva 02 de 2018: Modificación parcial de la Directiva 50 de 2017
- Directiva 50 de 2013: Funciones y horario de trabajo de los docentes orientadores
- Directiva 16 de 2013: Jornada Escolar, Laboral y Permisos Remunerados de Educadores
- Decreto 2105 de 2017: Jornada única escolar
- El Bajo Imperio: Cristianismo y poder imperial en Roma
- La Constitución de Prusia
- El Bajo Imperio: Difusión y organización del cristianismo primitivo
- Europa y sus relaciones con Oriente
- El Bajo Imperio: El mundo romano en vísperas del cristianismo
- El Bajo Imperio: Crisis del Imperio romano y su división
- Pedro el Grande, zar de Rusia
- Mapa de Europa en 1942
- Mapa de Europa: Bloques en 1914
- Mapa de los Balcanes a inicios del siglo XX
Economía
- La era del capitalismo
- Teorías y leyes de la economía
- Economía en la Edad Antigua
- Economía en la Edad Media
- Economía en el siglo XX: Segunda mitad
- Economía en el mundo moderno
- Economía en el siglo XX: Primera mitad
- Sectores económicos
- ¿Qué es la economía?
- Ahorro y crédito
- Bienes y servicios
- Comercio internacional
- Control empresarial
- Economía global
- Economía socialista
- El dinero
- El Estado y la economía colombiana
- El mercado
- El orden económico de Keynes
- Globalización
- Inflación y canasta familiar
- La contabilidad
- La economía
- La economía como ciencia social
- La empresa
- Las finanzas
- Manejo Fiscal: Impuestos en Colombia
- Mercado bursátil
- Microeconomía
- Planificación financiera de una empresa
- Producción, distribución y consumo de bienes y servicios
- Sector primario de la economía
- Sector secundario de la economía
- Sector terciario de la economía: Comercio y actividades financieras
- Sector terciario de la economía: El transporte
- Sector terciario de la economía: Turismo, educación y comunicaciones
- Sistema financiero
- Actividades Económicas: La Ganadería
- Actividades Económicas: La Minería
- Actividades Económicas: La Agricultura