contadores de paginas web

Europa y sus relaciones con Oriente

Europa y sus relaciones con Oriente

Hasta el siglo XVIII, la expansión europea por el mundo, tanto hacia Oriente como hacia las Américas, había estado controlada básicamente por españoles, portugueses, holandeses, ingleses o franceses. Sin embargo, a medida que avanzaba el siglo, proliferaron los países que se dedicaron a explotar determinadas regiones o productos. A las potencias marítimas tradicionales, se les sumaron Dinamarca, Suecia, Austria, Prusia o Rusia, con lo cual la competencia era cada vez más feroz. Las consecuencias de esta competencia llevaron a los europeos a intensificar el comercio más allá del Atlántico y, sobre todo, a recuperar y a mejorar los intercambios con los países asiáticos.

Las islas Molucas conocidas como las islas de las Especias
Las islas Molucas conocidas como las islas de las Especias, en Indonesia, se hicieron famosas durante los siglos XV y XVI cuando portugueses, españoles, ingleses y neerlandeses se enfrentaron por controlarlas, ya que en ellas se conseguían las preciadas especias que demandaba Europa.

Una parte muy pequeña de este comercio se hacía por vía terrestre, siguiendo las tradicionales rutas de las caravanas a través de Asia Central y China, pero gracias a los avances tecnológicos y a las mejoras de los navíos, la mayoría de los intercambios comerciales se realizaban por vía marítima. A mediados de siglo XVIII, los mercados asiáticos se llenaron de europeos. Los cambios más significativos fueron la concentración de holandeses en Indonesia o la de ingleses en la India en detrimento de los franceses, derrotados y castigados en la guerra de los Siete Años (1754-1763).

Sultan Fateh Ali Tipu (1750-1799)
Sultan Fateh Ali Tipu (1750-1799). A finales del siglo XVIII Inglaterra y Francia lucharon por el dominio del territorio en la India, en parte a través de gobernantes indios, pero también por intervención militar directa. La derrota del gobernante indio Tipu en 1799 marginó la influencia francesa. Esto fue seguido por una rápida expansión del poder británico a través de la mayor parte del subcontinente indio a principios del siglo XIX.

El comercio con el área del sudeste asiático se caracterizó siempre por la importación de productos exóticos de lujo: especias, tejidos de algodón y de seda, tintes, nitratos para la confección de pólvoras, cueros, café, té, porcelanas, etc. Las especias, dominantes en el comercio del siglo XVI, fueron desplazadas por las materias primas textiles en el siglo XVII y por el café y el té en el siglo XVIII.

Europa quería los productos de Oriente y cada vez le salían más caros, hasta el punto en que se vieron obligados a recurrir a los metales preciosos que obtenían de América. Se calcula, por ejemplo, que hasta un tercio de lo que se importaba del continente americano acababa en territorio asiático.

La ruta de las especias
Las dificultades de la ruta, ya fuese por tierra o por mar, elevaban el costo de las especias, que pasaban además por muchas manos que iban subiendo sus precios, antes de llegar a los consumidores europeos.

Esta clara descompensación no resultaba económicamente viable para las potencias europeas, que decidieron cambiar de estrategia. Por una parte, participaron diplomática y militarmente en las eternas luchas de los señores locales, que dieron como resultado una creciente dependencia de algunas zonas respecto de los europeos, como fue el caso de la India. Y, por otra parte, impusieron el control directo de las zonas de producción y de sus productores, como pasó en las islas de Ceilán y Java.

Colombo, Ceilán neerlandés, basado en un grabado de 1680.
Colombo, Ceilán neerlandés, basado en un grabado de 1680.

De este modo aprendieron a obtener beneficios dentro de los mercados asiáticos. En muy poco tiempo y sin intermediarios, los buques europeos controlaron el té chino, el café de Java, el opio y las telas indias y todo aquello que se les antojara sin necesidad de pagar como lo habían hecho hasta entonces.

Referencia:
Emse Edapp, S.L. (2016). Edad Moderna I. Siglos XVI y XVII. Bonalletra Alcompás.

Edad Moderna